martes, julio 21, 2020

Expediente Vallejo de Johnny Barbieri: algunos poemas


"Expediente Vallejo" Premio Copé de Oro de la XIX Bienal de Poesía 2019.



A las usinas he ido muchas veces. Será que he nacido desarmado del todo para luchar con el mundo?
(París, 26 de mayo de 1924)

III
A mi alrededor solo hay luz apagada.
Los colmillos crecen tras los pasos que vamos dejando atrás,
se amontona el veneno,
fluye el filo de la soga que nunca retorna al suelo.
Los griteríos nos ensordecen,
busco el rincón indicado para la deidad,
para construir sin premura los muros que nunca cruzaremos.
El mundo es de doscientos francos,
de un sombrero ladeado que apenas cubre mi cabeza,
de una habitación vacía con solo papeles para huir,
pequeños y pobres papeles donde deletrear algo.
El asfalto ha crecido,
hay un vasto espacio empequeñecido para mí.
Inmensos horizontes desplomados para mí,
enmudecidos rincones a donde hemos llegado huyendo
a duras penas.
Trepo innumerables veces solo para alcanzar minucias.
Esbozo letras a la luz del día,
apenas unas letras que se rehúsan a ser un abecedario hermoso.
El mundo frente al Palais-Royal voraz
me hace trizas, me derrumba.
Voy hecho un revés,
camino hecho un macizo revés.
Estoy sin espesor enumerando oficios que no han sido creados
para mí,
mis innumerables dedos solo saben ser pájaros inalcanzables.





IV
Tal vez no alcance a ser pájaro,
solo sea la ventana huida,
aquella ventana con sus dos ojos prófugos,
y esa luz tenue, misteriosa.
Aquella ventana inconclusa hecha de indefensas miradas
que solo existen para mí.
Tal vez no alcance a ser las mil flores que crecen
en el jardín,
solo sea la mano nerviosa eternizada a un movimiento
imperecedero sobre el papel.  
Afuera no hay límites solo ruidos extraños que dejamos pasar.
Tal vez no alcance a ser la hoguera en invierno,
solo sea el paso que va sin destino,
el abrir y cerrar de ojos cuando sienta alguna presencia
en esa ventana que a ratos me hinca con su mirada,
o solo sea la otredad que huye,
la pesada mano que se aferra al filo de la vidriera
que se rompe.





(Vivía en el Hotel de Richelieu con Henriette Maisse. Al frente una jovencita lo miraba desde su ventana. A ella le impresionaba su figura exótica que parecía irradiar una luminosidad que nunca antes había visto. El ser predestinado, años más tarde, llegaría a ser su esposo.)




VII
Hay un hermano en mí.
Una hermana en el sanatorio de La Charité
ofreciéndome su mano,
al fondo dos pájaros hermanados alzan vuelo y se van de París.
La rugosa espera siempre de pie.
Nada hay solo el hermano pan en su funeral
y la hermana leche arrodillada en un rincón,
está el hermano sin afeitar con su poncho de hule
para cuando llueva en invierno,
está la hermana con dos goterones de lágrimas
a la puerta de la casa esperando a los hijos,
el cartero con sus sandalias de cuero andando
por calles erróneas,
hermana sandalias encanecida.
Hay un hermano en ti,
un hermano de trancos largos para irse,
una hermana con su tosecita detrás de la puerta
hablando para nadie,
la hermana soledad que rehace sus espacios para no
sentirnos tan solos.
Hay un hermano a quien busco por años
y no lo encuentro nunca.



(Fueron doce hermanos. Vallejo los dividió en tres grupos: los viejos, los mayores y los pequeños. En París, la vida dura le mostró que, en los momentos más difíciles de su vida, aparecía un nuevo hermano: un amigo, una señora, la patrona del hotel, su pareja, etc.)





V. Visitando el Père Lachaise

90       La muerte es de cal.
Un arco de mármol abriga el pequeño espacio
hacia donde llegaremos algún día.
Recorro cien vértebras de granito,
lápidas que se agrupan conteniendo
95       todas las muertes.
Un árbol espectral crece hasta alcanzar la diestra
del infierno.
El camino es sinuoso,
las raíces van tejiendo sus cercos hasta devorar las tumbas.
100     En medio de aquel nido de cal
espera el silencio,
las gárgolas con sus ojos fríos
nos miran desde todos los lados,
los pasos perdidos nos han llevado
105     al centro del final,
tumba a tumba
como si se movieran por instinto,
cada enramada de muerte,
cada roca enverdecida por la lluvia,
110     los pasos exactos se despliegan
cómplices de aquel espacio que nos
sostiene en vilo.
El cementerio parece tomar vida,
yo lo veo en aquellos cuervos que nos miran
115     como si nos conocieran.
Un monolito de piedra en medio de un cuadrante
de yerbas agonizantes.
Un árbol ahorcado en su soledad.
El Père Lachaise deletrea sus muertos,
120     no hay premura,
solo existe la espera y la enmudecida
contemplación de la MUERTE.







VIII. En el Louvre

Una perspectiva de volumen sobre una mesa medieval
es el Louvre.
180     Una acuarela con colores degradados y
un cuadro de Chagall es otro Louvre.
La pata de madera de un caballete viejo que sostiene
un óleo de kandinski y la mujer que la mira es el Louvre.
El seno desnudo de la Maja, la mesa con frutos frescos,
185     la copa de vino tinto que tomaré a orillas del Sena es el Louvre,
Un rayo de sol, una turista japonesa que me sonríe mientras
contemplo la Venus de Milo es un pedazo de Louvre.
Aquel viejo pintor en la Place du Tertre que me ofrece un óleo
barato es otro pedazo de Louvre.
190     Las gárgolas del Notre Dame que parecen acecharnos,
un Delacroix es otro Louvre.
La mesa que se mueve, los jarrones chinos, el marco dorado,
el policía de seguridad que me observa,
el Gauguín del Orsay es el Louvre.
195     Las bancas del Palais Royal con nombres de poetas,
la Isla San Luis y la plaza Aragón es un pequeño Louvre.
Yo observo el atardecer
con un libro de Reverdy en la mano
y con todas las ganas de beber un Château Margaux
200     para aplacar el frío
¿sería eso acaso otro Louvre?
El pájaro que vuela,
la rubia que se sienta a mi lado y que posee los mismos ojos
que la Gioconda,
205     la gente que me rodea,
la guía con su radio en la mano haciéndome señas
y ese tren que se va sin mí es el eterno Louvre.






lunes, julio 13, 2020

Presentación virtual de las obras ganadoras del Premio COPÉ de poesía 2019



Este martes 14 de julio será la presentación virtual de los Poemarios Ganadores del Premio Copé de Poesía 2019.
Comentando se encontrarán Marco Martos, Julia Wong, Andrea Cabel y los ganadores Johnny Barbieri, James Quiroz y Karen Vila.
Lugar: Facebook live - 
Hora: 6 p.m.
Están todos invitados.
Ingreso libre