CANCIÓN DE AMOR PARA LILY
En el centro del desierto el viento mece tus cabellos
Pequeños hombrecillos con alas cantan en la noche eterna
Reina nocturna rompe los lazos de arena
Báñate en la luz más fragante de la rosa
y deja que vea tu grácil cintura de gacela
Como hecha de magia. A estas alturas de la noche
juegas con las estrellas y las extravías
quieres tener la libertad de los ciegos
Mi amor te ataca tierra-mar-aire
Nos separamos del mundo
rayas el cielo con las piernas
sacudes las caderas
cruzamos purgatorio y cielo
entonces, preferimos el infierno juntos
Un chorro de luz / desborde sensual
Qué ritmos de fuegos artificiales
qué velocidad fantástica inventamos
corremos, jadeamos, hasta confundir nuestros corazones
Nos entregamos en el más puro y loco amor de gatos
toco las piedras húmedas de tu cuerpo
he vendido mi vida por una canción.
TRISTE
Tu cabello ondulado
cae como lluvia
y escondes tus
recuerdos más tristes,
sola y desesperada,
buscas
la daga que pondrá
fin a tu aroma
de ángel sublime,
abriste las
pestañas de tus dos brazos
y el sol se
oscureció,
se perdió el color
de tu rostro;
pudo haber pasado
lo peor
pero Dios reconstruyó
el hilo de la vida
tus heridas ya no
tendrán cura,
mas lo importante
es la vida que rueda
en los espejos de
tu voz delicada.
DESTINO
Tu cabello ondulado
cae como lluvia
y escondes tus recuerdos más tristes,
sola y desesperada, buscas
la daga que pondrá fin a tu aroma
de ángel sublime,
abriste las pestañas de tus dos brazos
y el sol se oscureció,
se perdió el color de tu rostro;
pudo haber pasado lo peor
pero Dios reconstruyó el hilo de la vida
tus heridas ya no tendrán cura,
mas lo importante es la vida que rueda
en los espejos de tu voz delicada.
y escondes tus recuerdos más tristes,
sola y desesperada, buscas
la daga que pondrá fin a tu aroma
de ángel sublime,
abriste las pestañas de tus dos brazos
y el sol se oscureció,
se perdió el color de tu rostro;
pudo haber pasado lo peor
pero Dios reconstruyó el hilo de la vida
tus heridas ya no tendrán cura,
mas lo importante es la vida que rueda
en los espejos de tu voz delicada.
Desde tu corazón
supe que me amabas
Desde tus ojos
aprendí a mirarme
en cada amanecer.
Desde tu cuerpo
aprendí que soy un tatuaje
Desde tus palabras comprendí
que la vida tiene un sentido
Desde tus sueños
me di cuenta de que es bueno
vivir
Desde tu risa supe que
el amor es encanto
Desde tus lágrimas deduje
que no todo es placer
Desde tu mirada
supe que te puedo perder
y desde entonces lucho en el
mundo
tratando de acordarme de tu
aroma
y el humo me ahoga.
QUINTA
ESTACIÓN
supe que me amabas
Desde tus ojos
aprendí a mirarme
en cada amanecer.
Desde tu cuerpo
aprendí que soy un tatuaje
Desde tus palabras comprendí
que la vida tiene un sentido
Desde tus sueños
me di cuenta de que es bueno vivir
Desde tu risa supe que
el amor es encanto
Desde tus lágrimas deduje
que no todo es placer
Desde tu mirada
supe que te puedo perder
y desde entonces lucho en el mundo
tratando de acordarme de tu aroma
y el humo me ahoga.
Quiero
ayudarte
Jesucristo
a
cargar la cruz
hasta
el Gólgota
Quiero
volar contigo
en
tu vuelo azul.
Quiero
llevar el madero
y
aliviar tu dolor
No
quiero adivinar el final
de
esta historia,
pero
sé que triunfarás.
Vi
correr la sangre en tu rostro
te
vi caer en la tierra,
y
pobre de mí
tuve
compasión de ti.
La
corona ajustaba cada vez más tu bello rostro
sacabas
fuerzas de flaqueza
nadie
te podía humillar,
la
cruz la seguimos cargando con alegría.
Triunfaste
en la cima
eres
la luz, el mundo, el cielo, las estrellas
soy
tu hermano, mi nombre es Cirineo.
Tuve
el privilegio de escuchar tu voz
de
estar hombro a hombro contigo,
qué
liviana es la cruz si estás a mi lado
qué
suave es la fatiga, si estoy junto a ti.
Jesucristo
a cargar la cruz
hasta el Gólgota
Quiero volar contigo
en tu vuelo azul.
Quiero llevar el madero
y aliviar tu dolor
No quiero adivinar el final
de esta historia,
pero sé que triunfarás.
Vi correr la sangre en tu rostro
te vi caer en la tierra,
y pobre de mí
tuve compasión de ti.
La corona ajustaba cada vez más tu bello rostro
sacabas fuerzas de flaqueza
nadie te podía humillar,
la cruz la seguimos cargando con alegría.
Triunfaste en la cima
eres la luz, el mundo, el cielo, las estrellas
soy tu hermano, mi nombre es Cirineo.
Tuve el privilegio de escuchar tu voz
de estar hombro a hombro contigo,
qué liviana es la cruz si estás a mi lado
qué suave es la fatiga, si estoy junto a ti.
a cargar la cruz
hasta el Gólgota
Quiero volar contigo
en tu vuelo azul.
Quiero llevar el madero
y aliviar tu dolor
No quiero adivinar el final
de esta historia,
pero sé que triunfarás.
Vi correr la sangre en tu rostro
te vi caer en la tierra,
y pobre de mí
tuve compasión de ti.
La corona ajustaba cada vez más tu bello rostro
sacabas fuerzas de flaqueza
nadie te podía humillar,
la cruz la seguimos cargando con alegría.
Triunfaste en la cima
eres la luz, el mundo, el cielo, las estrellas
soy tu hermano, mi nombre es Cirineo.
Tuve el privilegio de escuchar tu voz
de estar hombro a hombro contigo,
qué liviana es la cruz si estás a mi lado
qué suave es la fatiga, si estoy junto a ti.
Johnny Barbieri y Juan Francisco Carrillo
Juan Francisco Carrillo, nació en
Lambayeque. Estudió Lengua y Literatura en la Universidad Nacional de Educación
Enrique Guzmán y Valle. El año 1986 publicó el libro de poemas Mundo
de aluminio; dos años después publicó el libro Poesía reunida.
Algunos de sus poemas fueron publicados
en Antología de poetas latinoamericanos,
de la Editorial Némesis (2018), en las revistas: La tortuga ecuestre (N° 399),
Fastos y La manzana mordida. Su cuento Pipilinita fue publicado en el libro
Comunicación 4, de Editorial Pilares. El año 2019 publicó el libro de poemas Hay
que volver a inventar el amor. Su libro de poemas Tal vez Corra
una lágrima en los ríos del mundo fue publicado recientemente en
Ediciones Viernes Literarios. Actualmente ejerce la docencia en la Institucion
Educativa 3066 Señor de los Milagros de Comas.