sábado, abril 27, 2013

Europeos buscan literatura mexicana

México busca refrendar su prestigio como invitado de honor en el Salón del Libro de Ginebra  

Aspectos de la pasada edición del Salón del Libro de Ginebra. Fotos: Conaculta
Aspectos de la pasada edición del Salón del Libro de Ginebra. Fotos: Conaculta

Los francófonos tienen ganas de leer a más escritores mexicanos nuevos y de géneros literarios más variados, afirma el escritor y editor Philippe Ollé-Laprune (1962).

Quien realiza desde hace más de 20 años una importante labor de intercambio cultural entre Francia y América Latina piensa que las letras mexicanas contemporáneas tienen buena presencia y acogida en los países francófonos y que es tiempo de consolidarlas.
 
“Es la época de confirmar, de mostrar un panorama más amplio, de abrirse a otros autores, de llevar una relación de fondo. Hay ganas de leer autores nuevos y más géneros y debemos consolidar todo esto”, agrega en entrevista con Excélsior.
 
El promotor y traductor comenta que la 27 edición del Salón del Libro de Ginebra, al que México asistirá como país invitado de honor a partir del próximo miércoles, es “una buena oportunidad” para reforzar el prestigio construido, ya que el encuentro librero suizo es “uno de los cinco más importantes de Europa”.
 
Para llevar su obra a este “lugar de mucho cruce”, al que no sólo acuden editores en lengua francesa, sino italiana y alemana, el curador del pabellón mexicano seleccionó a 15 autores de diferentes generaciones y géneros, entre quienes destacan Margo Glantz, Elsa Cross, Alberto Ruy Sánchez, Enrique Serna, Guadalupe Loaeza, Fabio Morábito y Álvaro Uribe.
 
En un espacio de 400 metros cuadrados, el Conaculta y la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana exhibirán alrededor de cinco mil títulos a los más de 100 mil visitantes que espera el Salón durante sus cinco días de actividades.
 
Para Ollé-Laprune, esta presencia de las letras mexicanas en Ginebra es el comienzo de una nueva etapa. “Durante mucho tiempo, las traducciones de las obras de escritores mexicanos a la lengua francesa eran muy escasas y no había realmente un panorama completo al respecto.
 
“En 2009, México fue invitado de honor al Salón del Libro de París y, como lo pudimos planear con más tiempo, durante dos años se hicieron propuestas a editoriales francesas. Se usó la mecánica del Programa de Apoyo a la Traducción (Protrad) y, finalmente, logramos publicar 45 novedades para el Salón. Jamás había pasado en las letras mexicanas una operación de ese tamaño”, recuerda.
 
Según datos del Protrad, aportados por la Dirección de Publicaciones del Conaculta, se han otorgado de 2000 al 2011 los apoyos para que diversas editoriales, sobre todo de Francia, pero también de Canadá y Bélgica, publiquen 60 títulos de autores mexicanos tanto jóvenes como de reconocido prestigio.
 
“Lo que me da gusto ver es que algunos autores han seguido publicando con su editorial, como David Toscana en Éditions Zulma, que abrió después la puerta para los cuentos de Eduardo Antonio Parra, y Enrique Serna en Métaillé, en la que pronto publicará su novela La sangre erguida”.
 
El director de la Casa Refugio Citlaltépetl advierte que nadie sabe qué autor vende más, porque los editores no hablan de esas cosas. “Nuestro trabajo debe ser pensar cómo representar mejor a la literatura mexicana en letras francesas y no en el terreno del mercado. Hemos despertado el interés. Antes había como un freno y ahora se ha logrado un flujo normal de las cosas”, añade.
 
Enrique Serna, quien con la novela mencionada posee cuatro títulos en francés, destaca que, fuera de México, Francia es el único país donde considera que tiene lectores: “En 2009 fuimos al Salón del Libro de París más de 40 autores y en todas las presentaciones había mucha gente. Creo que hay más curiosidad por nuestra literatura en Francia que en España”, indica.
 
Quien ofrece a los lectores francófonos además sus títulos Amores de segunda mano, Uno soñaba que era rey y El miedo a los animales espera que su obra también sea recibida cálidamente en el Salón del Libro de Ginebra, a donde asiste por primera vez.
 
El poeta Hernán Bravo Varela explica que tiene una gran expectativa de participar en un encuentro librero donde México no había tenido una presencia fuerte y que, además, será su mayor experiencia con los lectores francófonos, pues hasta ahora su poesía sólo se ha publicado en algunas revistas francesas.
 
En 2011, detalla, asistió con Luis Felipe Fabré, otro de los poetas invitados a Ginebra, al Mercado de la Poesía de París, donde la respuesta del público fue “maravillosa, gustó mucho nuestra poesía”. Dice que en Ginebra el reto es mayor porque compartirá escenario con autores reconocidos.
 
El Pabellón de México organizó seis conferencias, seis mesas de reflexión y análisis, entre las que destaca un homenaje a Carlos Fuentes, lecturas de poesía y dramatizada, además de una exposición fotográfica de Flor Garduño, cine y una muestra gastronómica.
 
Fuente: Excelsior

lunes, abril 22, 2013

El Formentor rinde tributo a la literatura de Javier Marías

El escritor madrileño Javier Marías.

En mitad del proceso de creación  de la que podría ser su próxima novela, Javier Marías ha recibido la noticia de que se le otorgaba el Premio Formentor de las Letras. Es a toda su trayectoria, por contribuir a definir la gran literatura europea y, según el jurado, por ser uno de los escritores más apreciados en el continente por libros como Tu rostro mañana, Todas las lamas, Mañana en la batalla piensa en mí, Corazón tan blanco y Los enamoramientos.
 
Un galardón que le hace especial ilusión al escritor, académico y columnista porque era mítico en los sesenta. “De adolescente”, recuerda Marías, “en la primera época del premio, oía hablar mucho de él teniendo en cuenta quienes participaban en las charlas de Formentor como Salinas, Benet, Barral, Hortelano… y, claro, con
 
En mitad del proceso de creación  de la que podría ser su próxima novela, Javier Marías ha recibido la noticia de que se le otorgaba el Premio Formentor de las Letras. Es a toda su trayectoria, por contribuir a definir la gran literatura europea y, según el jurado, por ser uno de los escritores más apreciados en el continente por libros como Tu rostro mañana, Todas las lamas, Mañana en la batalla piensa en mí, Corazón tan blanco y Los enamoramientos.
 
Un galardón que le hace especial ilusión al escritor, académico y columnista porque era mítico en los sesenta. “De adolescente”, recuerda Marías, “en la primera época del premio, oía hablar mucho de él teniendo en cuenta quienes participaban en las charlas de Formentor como Salinas, Benet, Barral, Hortelano… y, claro, con ganadores importantes, cuatro de los cuales son de mis escritores contemporáneos favoritos: Beckett, Borges, Gadda y Gombrowicz”. El premio que se suspendió en 1967 se recuperó hace dos años con Carlos Fuentes y en 2012 con Juan Goytisolo.
 
“La gente es muy amable conmigo”, asegura el escritor, al recordar que en los últimos años está recibiendo galardones con regularidad, algo que no deja de sorprenderle. “Tengo suerte. Pienso que he nacido de pie, al menos en este campo”, dice sonriendo. Luego, cuenta que a veces no ve demasiada importancia en lo que hace y que para llegar a la gente hay que tener suerte..
Marías (Madrid, 1951) recibe este galardón, dotado con 50.000 euros, tras un año marcado por el éxito internacional (ingresó en el selecto club de autores publicados en la serie Modern Classics de la editorial británica Penguin, sumado a las críticas elogiosas de su última novela, Los enamoramientos, en otros países) y la polémica en España al haber rechazado en octubre el Premio Nacional de Narrativa. Pero el Formentor lo acepta porque no tiene nada que ver con dinero institucional.
 
El jurado del premio, presidido por Basilio Baltasar y formado por Félix de Azúa, Manuel Rodríguez Rivero, Juan Antonio Masoliver Ródenas y Berta Vías Mahou considera que Javier Marías, “a pesar de haber comenzado a publicar a muy temprana edad, no ha perdido desde su primer libro el aliento y la creatividad que lo han convertido en uno de los escritores más interesantes de la literatura en español”. Además, valora especialmente la integración de acción descriptiva, introspección y digresión en perfecto equilibrio para la dinámica del relato.
 
El jurado recuerda que el autor madrileño ha sido reconocido por un público “dispuesto a compartir una narrativa nada complaciente, pero grata entre quienes aprecian la gran literatura”. Una obra que “representa un triunfo de la inventiva gracias a la habilidad con que ha sabido contar, describir y pensar, sin que se resienta el flujo narrativo”.
 
Y Javier Marías continúa en ello. Ahora inmerso en su novela número 12. No revela muchos datos. Duda. Apenas acierta a decir que se está acercando a la mitad, pero, afirma, “uno nunca sabe la extensión que va a tener un libro, y hasta que no la acabe no sabré si la publico o no”. Y da otra pista: el narrador vuelve a ser un hombre y a diferencia de sus otras obras, que suelen transcurrir en la actualidad, esta vez el escenario en 1980 evocado desde el presente.
 
Javier Marías, que recibirá el premio el 31 de agosto en Palma de Mallorca, se suma a una lista ilustre junto a otros escritores que recibieron el galardón en su primera época, entre 1961 y 1967: Jorge Luis Borges, Samuel Beckett, Juan García Hortelano, Uwe Johnson, Saul Bellow y Witold Gombrowicz. Un premio surgido en 1961 por iniciativa de Carlos Barral y Camilo José Cela e impulsado por editores extranjeros (Antoine Gallimard, Einaudi…), en el marco de los Encuentros de Formentor que habían nacido dos años antes y que se recuperaron en 2008.
 
El Premio Formentor de las Letras se convoca para reconocer el conjunto de la obra narrativa de aquellos escritores cuya trayectoria prolonga la gran tradición literaria europea, siendo su principal objetivo contribuir a consolidar y reconocer la posición de los autores que han sabido mantener su esencia literaria.
 
El Formentor reapareció en 2011, cincuenta años después con el mecenazgo de la familia Barceló, propietaria del hotel Barceló Formentor, en Mallorca, donde se han realizado estas citas, y la familia Buadas, antigua propietaria del hotel en los sesenta, cuando se crearon las jornadas y el premio. En 2011 lo obtuvo Carlos Fuentes y en 2012 Juan Goytisolo.

El galardón es anual y tiene la voluntad de destacar la alta cultura literaria al reconocer el conjunto de la obra de un gran escritor. "Aspira a convertirse en referencia que oriente a los lectores en medio de tantos premios con vocación más comercial", ha dicho en varias ocasiones Basilio Baltasar.

Fuente: El País

martes, abril 16, 2013

"Una de las ventajas de la literatura es que permite perfectamente la poligamia"

Manguel vive en la región francesa Poitou-Charentes.

Manguel vive en la región francesa Poitou-Charentes. (J.M. Martínez)
 
DONOSTIA. Con voz pausada y apacible, el escritor canadiense Alberto Manguel acaricia su barba cana y espesa mientras entona un discurso argumentativo para cada pregunta. Suena con la elocuencia de aquel que ha meditado sobre la literatura universal con una actitud analítica. Durante su adolescencia en Argentina fue lector de Borges y actualmente cuenta con una biblioteca de unos 35.000 ejemplares en su biblioteca personal de Francia. Fetichista declarado, está convencido de que hay por lo menos un libro para cada persona; la cuestión consiste en encontrarlo.
 
¿Qué tanto de fabulación hay en la escritura y en la lectura?
El acto narrativo es algo que es verdad y mentira a la vez. El escritor establece con el lector un pacto: yo te contaré una mentira para hablar de la verdad, y tú harás como si lo que te cuento es verdad para disfrutar de la mentira.
 
¿Cómo fue su traspaso de lector a escritor?
Siempre supe que era lector, es mi forma de conocer el mundo. Todo lector se deja tentar por inventar como aquellos que inventan mejor. Cuando empecé a escribir de adolescente, me percaté de que lo que yo estaba escribiendo no estaba a la altura de los textos que a mí me gustaban, y dejé de hacerlo. Entonces decidí consolarme con la lectura. Los primeros libros que escribí fueron consecuencia de esas lecturas. Mi primera novela nació de la voluntad de poner en palabras algo que no entendía.
 
Lo han definido como "hombre-libro" o un "Don Juan de las bibliotecas".
Es elogioso, pero pienso que Don Juan es un personaje para quien la conquista, no la relación, es importante. No me veo como un lector de conquistas, me veo como un lector de relaciones. Eso es una de las ventajas de la literatura, que permite perfectamente la poligamia.
 
En su opinión el amor por la lectura no se enseña, sino que se aprende; entonces, ¿no hay forma posible de inculcar ese amor?
Creo que no, desgraciadamente. Siento que querer enseñar a leer es como querer enseñar a enamorarse; podemos presentarles candidatos posibles o hablarles de lo que es el amor, pero nada sirve si la chispa no se produce. Y la chispa se produce por razones misteriosas. Con la literatura sucede lo mismo: la relación entre un lector y sus libros es secreta, si la entendiésemos entenderíamos lo que significa la esencia misma de esa persona. Lo que sí podemos saber es que en las bibliotecas hay un libro que ha sido escrito para nosotros. La cuestión es descubrirlo, pero no es más difícil que encontrar una persona en nuestra vida.
 
¿Qué es lo que aprendió de Borges mientras fue su lector?
Borges analizaba los cuentos mientras yo los leía, no para mí, sino para él; como un mecánico analiza un motor. Era como ser testigo de un gran cirujano mientras trabaja y habla de lo que está haciendo; en aquel momento tenía unos 15 años, fue mucho tiempo después cuando me di cuenta de que había sido testigo de la lectura de uno de los grandes escritores de todos los tiempos. ¿Qué aprendí? Cosas que después aparecen en su obra. Era como ver el ejercicio práctico de lo que uno lee como ejercicio intelectual.
 
Le concede mucha importancia a la libertad de elegir lecturas, ¿cree que los cánones interfieren en ello?
Sí, pero son esenciales. Podríamos probar a decir "no quiero saber nada de los cánones", pero es imposible estar en el mundo y no saber que tales libros están en la lista de best-sellers, o tales libros son considerados clásicos... Un canon no limita más que una biblioteca nuestras lecturas. Cada vez que nosotros hacemos una elección, inmediatamente hay un grupo mayor que hemos dejado de lado, eso interfiere en nuestra lectura. No podemos escaparnos a ese tipo de limitación.
 
Ha hecho listas de libros, bibliotecas, librerías... ¿no le crean cargo de conciencia esas enumeraciones?
Sí, por supuesto. Mi editor americano me pidió una lista de 100 libros. Hacer una lista de 100 libros es como elegir a dos entre tus tres hijos. Toda lista en ese sentido es injusta; aunque divertida, pero injusta.
 
Dice que la relación de un libro con el lector depende del momento y, también, de otras casualidades.
Eso forma parte del poder creativo del lector. El libro no cambia, pero El Quijote que leemos a los doce años no es el mismo que leemos cuando tenemos 20, o 40. Tomando la frase de Heráclito, creo que "nunca bajamos dos veces al mismo libro"; somos nosotros los que cambiamos.
 
Sin embargo, usted vuelve continuamente a 'Alicia en el País de las Maravillas'.
Es uno de los libros que releo mucho, no solo porque me divierte y me parece de una enorme inteligencia, sino porque es uno de los libros que más cambia en ese sentido. Es un libro insondable. Cuando lo leí por primera vez era muy joven, y no entendí sus bromas, pero me divertía. Después, de adolescente, tampoco entendía muchas de las bromas, pero sí la angustia de Alicia, que trata de ser una persona racional en un mundo de adultos locos; con reglas absurdas e imposiciones injustas. Luego hay una Alicia de la edad adulta, cuando uno entiende qué es la burocracia, la política...
 
Margaret Atwood confesaba en el festival su buena relación con las nuevas tecnologías, ¿usted también la comparte?
Soy muy torpe, no me siento muy cómodo con los instrumentos. Soy consciente de que no formo parte de un sistema de comunicación que se está haciendo cada vez más popular. Siento que soy como un escritor victoriano recluso, de los que no querían publicar y solamente distribuían algún texto entre amigos.
 
Posee una gran biblioteca de unos 35.000 ejemplares, ¿se considera fetichista en relación a los libros?
Sí, con los libros como con las personas, prefiero el objeto de deseo en carne y hueso y no en forma virtual
 
En alguna ocasión ha comentado que el ejercicio de lectura ya no tiene el prestigio que poseía.
Es el acto intelectual el que no tiene el prestigio que poseía antaño. Creo que eso es una consecuencia de los valores mercantiles de nuestra sociedad, que siempre han existido; pero antes el valor del acto intelectual se consideraba superior al valor del acto mercantil. Hemos desarrollado ciertos valores que eran condenados. La ambición, la envidia, la codicia... son ahora valores aceptables. Hubo hace unos años un movimiento de la derecha conservadora que decía: "Ya no vamos a sentirnos avergonzados por ser todas estas cosas". Eso es bastante peligroso, es como que el pedófilo diga que se enorgullece de serlo.
 
¿Diría que es un injusto que se estime el valor de una novela en relación a sus ventas?
Más que injusto me parece equivocado. Hay novelas muy buenas, que se venden muy bien, y novelas muy malas, que se venden muy bien. Esa relación no es de consecuencia. El problemas es cuando decidimos que el único valor que cuenta es que se venda bien.
 
¿En qué medida nos perjudica que el libro sea un producto comercial?
En gran medida. Todo producto de consumo, si depende de la elección consciente del consumidor es útil; pero si lo compra porque lo obligan o lo han seducido es otra cosa. Si no puedo reflexionar sobre lo que voy a comprar eso es un problema; tanto si es una lata de sardinas como si es una novela. Desgraciadamente hemos elaborado estrategias comerciales para mantener esta sociedad de consumo. Es peligroso porque es un círculo dentro del cual no se permite la reflexión. La sociedad de consumo muestra como valores positivos la facilidad, la superficialidad, la rapidez... todos los valores opuesto a los de la reflexión intelectual.
 
En su última visita a Bilbao dijo que "en momentos de crisis como estos la lectura se convierte en un acto subversivo". Desde entonces han muerto Stephane Hessel y José Luis Sampedro, ¿sigue quedando lugar para la subversión literaria?
El escritor es subversivo porque el lector hace una lectura subversiva. Un texto subversivo que no es leído como tal deja de serlo, al menos en el momento de la lectura. Lo que entiendo por subversivo es que permite reflexionar y ayuda a pensar. Eso es absolutamente necesario en una sociedad.
 

jueves, abril 11, 2013

Realizarán encuentro sobre poesía mística en la UNAM


 
El evento se realizará del 15 al 19 de abril en el Instituto de Investigaciones Filológicas y la Facultad de Filosofía y Letras de esta casa de estudios.
 
Del 15 al 19 de abril, en el Instituto de Investigaciones Filológicas y la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, se llevará a cabo el Coloquio de Poesía Mística en México y en América Latina, considerado como uno de los contados esfuerzos académicos y de difusión a nivel latinoamericano que buscan impulsar, actualizar y debatir la vigencia del análisis de las diversas formas de la escritura mística.
 
De acuerdo con la investigadora Margarita León Miranda, del Instituto de Investigaciones Filológicas de la UNAM, resulta necesario reformular desde el discurso literario, específicamente desde el poético lo que sucede en torno a la poesía mística en la actualidad, que se abra al debate, porque “no podemos seguir negando a nuestros poetas su misticismo o su categoría de poetas místicos modernos”.
 
“Entendemos por poesía mística aquella inspirada en experiencias interiores, inmediatas, furtivas, que tienen lugar a un nivel de conciencia, que supera la que rige a la experiencia cotidiana, ordinaria y objetiva, de la unión con el todo, con Dios, con el absoluto: es aquella poesía que refleja la experiencia directa con el todo.”
 
En el coloquio se contemplan conferencias magistrales dictadas por Luce López-Baralt, de Puerto Rico; Elsa Cross y Mauricio Beuchot, de México, además de María Auxiliadora Álvarez, de Venezuela, mientras Javier Sicilia ofrecerá la lectura poética de clausura; también participarán poetas como Angelina Muñiz-Huberman, Verónica Volkow, Marianne Toussaint, Mariana Bernárdez, Víctor Toledo y Raúl Renán.
 
“Cuando digo vigente no quiero decir que sea popular, que sea muy leída. Pero creo que es muy vigente en nuestro mundo secularizado: cada vez somos más descreídos, nos vemos solos como en el desierto.
 
“Hay estudios psicológicos y psiquiátricos sobre el fenómeno místico, pero en esta ocasión no cuestionamos eso, sino más bien estudiamos el texto poético: de qué manera un poeta expresa ese tipo de experiencias”, destacó la especialista.
 
El encuentro se inaugura el próximo lunes, a las 10:00 horas, en el Instituto de Investigaciones Filológicas de la UNAM, con una conferencia a cargo de Luce López-Baralt, poeta y catedrática de la Universidad de Puerto Rico.
 

lunes, abril 08, 2013

Gran maratón poético por el "Día del poeta peruano"



GRAN MARATÓN DE POETAS
 
15 DE ABRIL, «DÍA DEL POETA PERUANO»
Homenaje al 1er. Congreso de Poetas - Abril de 1985,
en la Univ. Nacional de San Marcos.
Se lanzará el libro homenaje:
LOS HACEDORES DEL FUEGO. Compilación

LUGAR: Casa de la Literatura- Lima
HORA: De dos a ocho PM. DÍA: Lunes 15 de abril
 
A todo el mundo desde la Casa de la Literatura Peruana
LANZARÁN LA COMPILACIÓN NACIONAL:
«CON SOLAZ Y FORZADO ATREVIMIENTO»
(Con 33 atrevidos y forzados decimistas del Perú)
También el libro de Flavia Cosma
EL CUERPO DE LA LUNA
 
INVITADOS EXTRAORDINARIOS
 
Diana Alvarez Muñoz /Argentina

 
1955. Chile. Escritora y periodista. Reside en Argentina. Escritora de temas científicos, especialmente los relacionados con la salud de los sectores más vulnerables. Ha trabajado en los diarios El Mercurio de Antofagasta, La Estrella del Norte de la misma ciudad, en los canales de TV de la U. del Norte y U. Católica del Norte. Pertenece a la red de periodistas-escritores científicos de la Argentina. Ha participado en varios encuentros de escritores y ferias del libro en Buenos Aires, Quintero, Chile; y varias ciudades de la Araucanía, Chile.
 
Pedro Serazzi/ Chile
 
Chañaral, 1950. Chile. Poeta, narrador y periodista, de estatura latinoamericana. Muy conocido y amado en Perú. Promotor cultural reconocido internacionalmente. Ha concurrido a eventos literarios como invitado extraordinario. Fue condecorado como Miembro de Honor y Medalla de Oro a la excelencia. Varios libros editados en Perú y antologado en varias partes del mundo. Benefactor de la señal televisiva digital de la Casa del Poeta Peruano con sede en Lima.
 
Antonio Miranda. Brasil
 
Periodista, ensayista, narrador y poeta, es brasileño nacido en 1940. Autor de mas de 40 títulos de poesía, novelas, cuentos, ensayos y libros técnicos. Miembro de la Academia de Letras del Distrito Federal, fue colaborador de revistas y suplementos literarios del Dominical do Jornal do Brasil, de La Nación (Buenos Aires) e Imagen (Caracas, Venezuela).
Ha vivido en Venezuela, Argentina, Puerto Rico e Inglaterra durante los años de exilio y de formación. Es director (r) de la Biblioteca Nacional de Brasilia y mantiene el Portal de Poesía Iberoamericana: (www.antoniomiranda.com.br) que tiene más de dos millones de visitas por año.
 
Flavia Cosma / Rumanía
 
poeta de origen rumano, escritora y traductora. Ha ganado premios como productora independiente de documentales para televisión, como directora y guionista. A lo largo de su carrera, ha recibido numerosos premios. Por citar algunos: Su libro 47 Poems (Texas Tech University Press) recibió el Premio ALTA Richard Wilbur Poetry in Translation, tercer premio en la competencia John Dryden Translation de 2007 por la co-traducción In The Arms of The Father, poemas propios (British Comparative Literature Association & British Literary Translation Centre). Etc. Fue condecorada como "Miembro de Honor, con Medalla de Oro por su labor de promoción cultural y docente", en la III Edición del Festival Internacional de Poetas Huari. Peru 2010.



martes, abril 02, 2013

La verdad sobre la limpieza étnica

El escritor danés Jussi Olsen-Adler en Barcelona.

Sonriente y con un vaso de sangría en la mano, Jussi Olsen-Adler (Copenhague, 1950) parece haber dejado atrás toda la oscuridad que, dice, trata de encerrar en sus libros, a la manera en que un cazafantasmas encerraría un fantasma en una caja del tamaño de una novela.

Por oscuridad entiende el creador de la serie dedicada al Departamento Q, el departamento de la policía danesa que lidera el gruñón Carl Mork, el abuso de poder. Porque, asegura, todas sus novelas "tratan algún tipo de abuso de poder". La última, 'Expediente 64' (Maeva), el de un psiquiatra.

En concreto, el psiquiatra Christian Keller, ideólogo de las instalaciones que albergaba el islote Sprogo, lugar en el que se encerraba a mujeres de dudosa reputación (prostitutas, promiscuas) y aquellas que se creía tenían un leve retraso mental, para impedir que se reprodujeran. Algunas de ellas eran incluso literalmente secuestradas para ser trasladadas a ese lugar, del que únicamente podían salir si accedían a ser esterilizadas. "Todo por mantener la raza", sentencia el escritor.
 
"Se cree que el asunto de la limpieza étnica lo inventaron los nazis, pero no fue así. Lo inventamos nosotros, los escandinavos", sentencia el escritor, hijo de psiquiatra, que recuerda haber pasado junto al islote en cuestión al menos dos veces al año desde que era un crío.
 
"Dinamarca es un archipiélago, y para visitar a unos amigos debíamos pasar obligatoriamente por la isla. Y veía a las mujeres. Yo creía que habían cometido algún crimen. Pero mi padre me dijo que no, que simplemente estaban allí porque había alguien que estaba abusando de su poder para encerrarlas. Y ese alguien eran un montón de doctores, doctores como él, de los que nadie hablaba en la prensa. En todo el tiempo que estuvo activo el psiquiátrico, sólo se escribió un artículo al respecto. La sensación era de que nadie sabía nada", explica.
 
Las instalaciones abrieron en 1921 y en los años 80 aún se producían desapariciones de mujeres. De hecho, la historia arranca en 1985, en una fiesta. Pero no tarda en trasladarse a las oficinas en las que trabaja el Departamento Q, encargado de resolver precisamente una serie de desapariciones de mujeres ocurridas en los 80. Las pistas llevaran a Carl Mork y su equipo hasta la aislada Sprogo, donde descubrirán que su país esconde al mundo algo de lo que no sólo debería avergonzarse sino por lo que incluso debería ser juzgado.
 
"He escrito esta novela como un homenaje a mi padre, que trató de denunciar el abuso de poder que se estaba cometiendo en la isla y del que nadie quería hablar. Mi deseo es que alguien pida perdón a todas esas mujeres por lo que les hicieron. Muchas de ellas siguen vivas, pero nadie las ha escuchado nunca. Incluso hubo quien se sorprendió en el propio gobierno danés de que algo así hubiera estado ocurriendo", explica. ¿Ha pasado algo en ese sentido desde la publicación de la novela? "No. Nadie ha pedido perdón aún", contesta.
 
Es curioso, dice el escritor, "se cree que los países escandinavos están muy avanzados a nivel social, pero también lo están en otros sentidos que son mucho peores".

Del frío danés al calor de España

Adler-Olsen se enamoró de Barcelona hace ahora justo un año, cuando visitó la ciudad para participar en el encuentro de novela negra BCNegra, y decidió comprarse un piso en la Barceloneta, donde reside buena parte del año.
 
"Barcelona es perfecta, por el clima, por la gente, por el arte, y por su cosmopolitismo", dice. A partir de ahora piensa escribir desde la capital catalana y admite que quizá eso afecte, a la larga, a sus historias. Quizá vayan abandonando poco a poco la oscuridad.
 
Desde una de las terrazas del turístico Parque Güell, lo único que puede hacer es encogerse de hombros y susurrar: "Quién sabe". En cualquier caso, se apresura a añadir, "todo dependerá de mis lectores. Pienso mucho en ellos cuando escribo", confiesa. En ellos y en todo lo que va mal en el mundo.
 
fuente: El Mundo. es